Los pobladores de Empalme Olmos han estado toda la pasada semana compartiendo videos que critican la instalación de una empresa en la exfábrica de Metzen y Sena. Esta reciclará parte de la basura del departamento, mientras el material sobrante será enterrado en el centro de disposición final de residuos conocido como Cañada Grande. A lo que se oponen justamente es a esto último: a que Cañada Grande no se cierre de forma definitiva.
Los videos abordan desde diferentes ángulos una sola crítica: la gestión de la basura por parte del gobierno departamental. Uno de ellos dice que Empalme Olmos lleva 32 años de “abandono político”. Van tres décadas desde que la localidad “fue abandonada por quienes debían haberla cuidado”, se insiste.
“Nos impusieron la basura. Esa que nadie quiere cerca, la que otros rechazan. La convirtieron en nuestro paisaje cotidiano hasta hacerla parte de nuestra identidad. Empalme Olmos pasó a ser un basural disfrazado de pueblo”, advierte el video, que hace énfasis en que la zona está compuesta por hombres y mujeres trabajadores.
Según señalaron vecinos de la zona a El País, el material audiovisual revela el sentir de un pueblo que se forjó primero en un cruce de líneas de tren y luego al lado de una empresa de azulejos que comenzó a funcionar en 1937.
En 1942, con la expansión de esta compañía, surge la marca Olmos. En 1945 Oscar Sena pasa a formar parte de la empresa, surgiendo así Metzen y Sena. En años posteriores esta empresa local pasó a producir, además, porcelana sanitaria y vajilla, que fue el orgullo del lugar.
Según indicó a El País el edil Fabián Colombo (Partido Nacional), “en la Junta Departamental no entró oficialmente ningún proyecto sobre la planta de reciclaje a instalar en Empalme Olmos”.
Sin embargo, Colombo se enteró extraoficialmente que el tema se tratará mañana lunes en la Comisión de Presupuesto de la Junta Departamental y, al día siguiente, el martes, está convocada la Comisión de Medio Ambiente, donde el asunto ingresará como grave y urgente.
“Lo que trascendió fue que una empresa procesará parte de la basura (de Canelones) en la exfábrica de Metzen y Sena y, lo que no se pueda reciclar, se llevará al sitio de Cañada Grande”, explicó el curul nacionalista.
Ubicada en el kilómetros 39,500 de la Ruta 8 y a dos kilómetros de Empalme Olmos, Cañada Grande centraliza la basura de todo el departamento de Canelones.
En los últimos años, se inició un proceso de cierre que fue bien visto por los vecinos. Sin embargo, no se llegó a buen puerto.
El 23 de febrero de 2024, el Ministerio de Ambiente y la Intendencia de Canelones firmaron un Convenio que tenía por objetivo iniciar las obras de clausura del actual sitio de disposición final. El departamento canario se sumaría al Programa de Apoyo a las Intendencias que viene impulsando dicho ministerio, para mejorar la gestión de residuos.
El edil Colombo explicó que había un proyecto de cierre de Cañada Grande que, inclusive, llevó a que el gobierno nacional entregara partidas económicas para llevarlo adelante.
Lo que sucede ahora es que los vecinos de Empalme Olmos se oponen al proyecto de clasificación en la exfábrica de Metzen y Sena porque ello determinará que continúe funcionando Cañada Grande.